15/4/07

Recordar es Vivir, segunda parte

Hola queridos amigos. En la primera parte de este tema, les comentaba de lo afortunados que fuimos en nuestra infancia y cómo nos divertíamos con cada cosa que hacíamos. En esta segunda, y última parte, les seguiré contando acerca de estos años maravillosos. espero les guste y si desean aportar algo, pues su opinión será bienvenida.
En cada pueblo había un solo fotógrafo. Todos los niños que nos tomamos fotos (en Villa Vásquez) solo estábamos en dos poses: una, al lado de una matica de flores y la otra, encima de un radio. En aquellos tiempos (que tampoco son tan lejanos) los niños no veíamos tanta televisión (en la mayoría de los hogares eran en blanco y negro, regularmente de 13 o de 19"), pues estábamos mas ocupados de los juegos en los patios, en fabricar cosas, por ejemplo, éramos famosos haciendo hamacas, las cuales me tocaban estrenar y ver si funcionaban, lo que me trajo como consecuencia tres claros en la cabeza y siete puntos en total. Una amiga me contó que ellos subían a las montañas y bajaban en yaguas. Cuando nos disponíamos a ver televisión era porque había una serie interesante: Chiquilladas, Candy Candy, Remy y Marco, Heidy, El Galáctico, Monkey Magic y por supuesto, El Chavo. En esa época no había tanta tecnología y los escasos juegos de Nintendo que aparecían eran gracias a un familiar que vivía en "Nueva York" (Sí, porque aunque vivieras en cualquier otro estado, estabas en NY) y los mandaba de regalo.
En fin, eran "otros tiempos", los que no volverán y nuestros hijos no podrán disfrutar, por el mismo afán de vida, porque uno aquí se la pasa "encerrado", y ni imaginar que salgan al frente a jugar sin la compañía de un adulto. También porque ahora lo que predomina es el internet, los juegos de video, xbox, wii, y todo lo que de tecnología se trata, que para nosotros es chino.
Sólo nos queda contarles a nuestros hijos aquellas historias maravillosas acerca de nuestra niñez en esos pueblos desconocidos y podremos comprobar que "Recordar en Vivir"

1 comentario:

Ilonka dijo...

Es hermoso, reconfortante y a la vez nostálgico recordar esos años dorados, cuando eramos felices con practicamente nada, cuando podiamos jugar en la calle por horas sin miedo a desconocidos con malas intenciones; cuando nos perdiamos montando bicicletas en el barrio con el unico temor en mente de la pela que quizás nos esperaba en casa por no haber "hecho la tarea antes de cojer la bici". Eran otros tiempos, con menos tecnología pero mas seguridad, quien necesitaba una tv? si tenias todo un mundo de aventuras allá fuera sin límite. Que pena da que nuestros niños no disfruten de la misma suerte que nosotros; por eso, como dice mi amiga Lupe, Recuerden chicos...por que recordar es vivir!!